Enogastronomia – Best Western Hotel La Conchiglia
La “dieta mediterránea” ahonda sus orígenes en la historia de Italia del Sur y del Cilento, adquirida como tradición, en la forma y las costumbres, de los hábitos alimenticios griegos: arraigadas y mantenidas a través de los siglos, antes de la miseria que caracterizó la Edad Media y sucesivamente por la tradición campesina meridional.
La tradición alimenticia de los campesinos ha elaborado a lo largo de los siglos aquel sistema que en la actualidad se llama “Dieta Mediterránea”, estudiado y codificado por el médico estadounidense Ancel Keys, que desembarcó en Salerno, después de la quinta Armada de 1944, y quedó fascinado por las sanas costumbres alimenticias de la población del Cilento, donde más tarde se trasladó, precisamente en Pioppi-Pollica, para profundizar sus estudios sobre los efectos que la alimentación tiene con respecto a las llamadas enfermedades del bienestar (hipertensión, arteriosclerosis, diabetes y en general las enfermedades cardiovasculares).
Nació así la dieta mediterránea caracterizada por una alimentación a base de pan, pasta, legumbres, aceite extra virgen de oliva, verduras, poco queso, pescado azul, fruta y vino, con un limitado consumo de los llamados alimentos de lujo, como carnes y dulces.
Esta manera de alimentarse ha sido sucesivamente comparada con las dietas de otros países con una fuerte incidencia de enfermedades cardiovasculares, como Finlandia, Alemania, Estados Unidos, confirmando aún hoy la validez del descubrimiento del Dr. Keys, que el 26 de enero de 2004 cumplió felizmente los 100 años.
En todo el territorio del Cilento podrán saborear las varias especialidades de la dieta mediterránea, como la buscadísima Mozzarella de leche de Búfala Campana, recién hecha como los demás derivados colaterales, como el requesón, finísimo, fresco o salado, el yogur, las “provolas” y la rara mozzarella envuelta en hojas de mirto, los quesos de la zon interior del cilento, el aceite extra virgen de oliva con Denominación de Origen Protegida, elaborado con una aceituna autóctona, la famosa “Pisciottana”.